¿Qué hacer?
Lo más interesante es la laguna de Guatavita, con ese color verdoso que tiene. El pueblo de Guatavita es bonito, pero algo turístico y caro, creo que merece más la pena quedarse en el pueblo de al lado que es Sesquilé e ir a la laguna desde aquí.
En el pueblo en sí, merece la pena dar una vuelta, incluso ir a ver el mirador del embalse de Tominé y también hay un museo, saber que tanto el museo, como la laguna, cierran los lunes.
La visita a la laguna es guiada y la verdad es que nos resultó muy interesante, te hablaban mucho sobre los indígenas, de una manera práctica y entretenida. Aparte de que la laguna es preciosa.
En el pueblo en sí, merece la pena dar una vuelta, incluso ir a ver el mirador del embalse de Tominé y también hay un museo, saber que tanto el museo, como la laguna, cierran los lunes.
La visita a la laguna es guiada y la verdad es que nos resultó muy interesante, te hablaban mucho sobre los indígenas, de una manera práctica y entretenida. Aparte de que la laguna es preciosa.
¿Cómo llegar?
Para ir a Guatavita, fuimos desde Suesca primero un bus desde la plaza del pueblo que nos dejo en Sesquilé, y desde ahí otro bus a nuestro destino. Desde Bogotá me imagino que se cogerá en la terminal Norte.
Para ir cogimos un bus a Bogotá que nos dejo en el centro de la capital, pero que te llevaba por toda la montaña. Nosotros después fuimos a la terminal El Salitre, para irnos a Medellín.
Para ir cogimos un bus a Bogotá que nos dejo en el centro de la capital, pero que te llevaba por toda la montaña. Nosotros después fuimos a la terminal El Salitre, para irnos a Medellín.
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