¿Qué hacer?
El gran atractivo turístico que tiene este lugar, es su piedra granítica de 220m salida de la nada, pero no hay que perder de vista el agua azul que rodea este monolito, y menos aun el pueblo, lleno de colores y zócalos diferentes.
Al peñón se puede llegar andando desde el mismo pueblo, aunque esta algo lejos, también se puede ir en mototaxi o en un bus que salga desde el pueblo y te deje en la entrada. Creo recodar que la entrada cuesta 18.000 pesos, me pareció excesiva, pero realmente es un sitio que merece la pena visitar, aunque en la cima haya más gente que en un centro comercial.
En subir se tardan unos 15 minutos, pese a lo que quieran exagerar. Desde arriba se ve una increíble panorámica de todo el embalse con las islillas, cuando te dejan asomarte entre tanta gente. Lo mejor para la vuelta es bajar a la carretera y esperar un bus, nosotros bajamos hacia el lado contrario a Guatapé con intención de ver las vías de escalada y una mototaxi nos llevo casi por el precio del bus al pueblo.
El pueblo es precioso y lleno de colores. Nosotros aparte de dar vueltas y más vueltas por el pueblo, fuimos al mirador que hay como a las afueras y tomamos un café en Café Sin P; donde te preparan el café al momento de manera tradicional, mientras te explican la técnica, y el precio es el de un café normal, o menor.
Al peñón se puede llegar andando desde el mismo pueblo, aunque esta algo lejos, también se puede ir en mototaxi o en un bus que salga desde el pueblo y te deje en la entrada. Creo recodar que la entrada cuesta 18.000 pesos, me pareció excesiva, pero realmente es un sitio que merece la pena visitar, aunque en la cima haya más gente que en un centro comercial.
En subir se tardan unos 15 minutos, pese a lo que quieran exagerar. Desde arriba se ve una increíble panorámica de todo el embalse con las islillas, cuando te dejan asomarte entre tanta gente. Lo mejor para la vuelta es bajar a la carretera y esperar un bus, nosotros bajamos hacia el lado contrario a Guatapé con intención de ver las vías de escalada y una mototaxi nos llevo casi por el precio del bus al pueblo.
El pueblo es precioso y lleno de colores. Nosotros aparte de dar vueltas y más vueltas por el pueblo, fuimos al mirador que hay como a las afueras y tomamos un café en Café Sin P; donde te preparan el café al momento de manera tradicional, mientras te explican la técnica, y el precio es el de un café normal, o menor.
¿Cómo llegar?
Desde Medellín es fácil, vamos a la terminal Norte, depende de donde estemos lo mejor es coger el metro y bajarnos en Caribe, y desde ahí salen buses a nuestro destino.
La vuelta la podemos hacer a Medellín o quedarnos en Marinilla y coger un bus a nuestro siguiente destino, en nuestro caso; Río Claro.
La vuelta la podemos hacer a Medellín o quedarnos en Marinilla y coger un bus a nuestro siguiente destino, en nuestro caso; Río Claro.
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